Estrategias para mejorar la comunicación con niños y niñas con TEA

En la actualidad entendemos el trastorno del espectro del autismo (TEA) como un trastorno de salud mental que interfiere en menor o mayor magnitud en el desarrollo de las actividades de la vida diaria.

Hay una primera área de dificultad que es la que hace referencia a los problemas de comunicación e interacción social.

Las dificultades que presentan los niños y niñas con trastorno del espectro del autismo al establecer una comunicación verbal correcta, utilizando un lenguaje funcional, les puede dificultar la interacción social.

Esta dificultad puede provocar una mayor frustración al no ser comprendidos y que puede derivar en un aumento de la ansiedad. Además, también nos encontramos dificultades en la comunicación no verbal mediante el uso de gestos, expresiones faciales, postura corporal o contacto visual. 

A raíz de todas estas dificultades que pueden presentarse en menor o mayor magnitud, es frecuente que el niño o niña pueda presentar dificultades en el entorno escolar o en el propio domicilio. Y es por ello, que tenemos que adecuar y facilitar un entorno que ayude a la comprensión de sus demandas y necesidades para facilitar una introducción óptima a la rutina de la vida diaria.

A continuación, enumeraremos y entraremos en detalle con dos herramientas materiales de uso diario que pueden darnos una respuesta de gran utilidad en las dinámicas más cotidianas. En este caso, se trata de herramientas de gran ayuda para los niños y niñas con TEA que presentan un lenguaje escaso o nulo.

Elaborar un horario visual que ayude en sus rutinas diarias

El horario visual nos será de gran utilidad para estructurar las diferentes dinámicas y actividades que se realizarán durante el día, desde que se despierta hasta que se va a dormir. En este horario visual podemos poner las rutinas diarias como la higiene, las ingestas y el descanso nocturno, así como las rutinas o tareas diarias que pueden ser de mayor complejidad y que, si las anticipamos, le resultarán más fáciles.

Pasos para hacer el horario visual:

• Necesitarás una tira de cartulina ancha, donde podrás colocar fotos o pictogramas (dibujo o signo que expresa un mensaje, lugar, figura u objeto real) que muestren las rutinas diarias.
• Selecciona las fotos o pictogramas que te ayuden a mostrar cual es la rutina.
• Colócalas en la tira de cartulina, pegadas con un velcro, según el orden del día y siguiendo las recomendaciones del profesional de referencia.
• Coloca la tira del horario visual en sentido vertical, en un lugar visible y adecuado para la altura del niño.
• Para indicar el inicio de la actividad señalaremos en presencia del niño o niña la foto o pictograma y lo acompañaremos de una indicación verbal.
• Finalmente, una vez haya concluido la dinámica, retiraremos la foto o pictograma acompañándolo de un reforzador verbal positivo para indicarle que lo ha realizado correctamente.

Una tira de comunicación para las necesidades básicas

La tira de comunicación, a diferencia del horario, nos servirá para establecer una comunicación más directa con el niño o niña, de esta manera nos podrá qué quiere realizar en ese momento o qué le apetece.

Nos será de gran utilidad para comunicar actividades tan básicas como ir al baño, tener sed o hambre, así como dinámicas de interés que sean más frecuentes.

Es importante el conocer los intereses del niño o niña para poder individualizar las fotos o pictogramas para que sean de mayor utilidad.

Pasos para hacer una tira de comunicación:

• Necesitarás el mismo material que en el caso del horario visual
• La diferencia es que la posición de la tira de comunicación será horizontal.
• Colócala en un lugar visible y accesible para el niño o niña
• Engancha en la tira las diferentes fotos o pictogramas correspondientes a las necesidades más habituales.